I want out

Al principio parecía que los que nos habíamos reunido para esta fiesta de power metal eramos muy pocos y que Helloween no tocaría, sin embargo al transcurrir las horas, la cantidad de gente fué sencillamente impresionante. El área de VIP estaba totalmente abarrotada, por lo que muchos optamos por subir a las gradas para poder apreciar mejor el espectáculo.

Hubiera sido interesante ver la respuesta del público si este concierto se hubiese realizado acá en Guatemala, ya que al principio parecía que había más chapines que guanacos; en las afueras la banda lucía sus banderas y asismismo durante todo el concierto se observaron más banderas de Guatemala que de El Salvador. Al final, obviamente, los salvadoreños nos sobrepasaron en número pero se debió a que se dió entrada libre sin distinción de localidades.En resúmen, valió la pena el largo viaje hasta El Salvador para ver a esta banda que no dejó nada que desear. Esperemos que en lo que queda del año tengamos la oportunidad de tener alguna buena banda y no tengamos que viajar nuevamente. Nos vemos en el concierto de TIERRA SANTA.

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